Todas las fotos salen
muy oscuras y no sé por qué. El caso es que esto fue ya después
del concierto, todos echos polvo, sudando y con las piernas destrozadas,
tirados en el parque más cercano que había a descansar un
poco (de verdad que lo necesitábamos...). El concierto acabó
a eso de las una y algo, y Cati, Elena y su hermano (el que hace las fotos)
tuvieron que irse a Linares de vuelta, así que nos quedamos Cózar,
Dani y yo solitos y desamparados en Jaén... Así que nos fuimos
de marcha por ahí, y cuando ya no podíamos andar más
pillamos un taxi y nos fuimos a seguir la fiesta en un local que nos habían
prestado para dormir...